DÍA 14 DE ABRIL
Hola:
Buen inicio del curso, hoy es el primer día del trimestre y
os voy a explicar como os voy a proponer las tareas a lo largo de este
trimestre, mientras no nos podamos ver.
Decirle a mamá o a papá que os lo lean si es necesario.
Todos los días os propondré una adivinanza y un pasatiempo,
tendréis todo el día para resolverlo, de todas maneras no os preocupéis al día
siguiente os daré la respuesta. También os voy a ir mandando unos cuentos
cortos y os los voy a leer, cada uno que decida si los lee, los escucha o las
dos cosas. Me gustaría que de vez en cuando hicieseis las dos cosas y en
diferente orden, a veces primero lo leáis y luego lo escuchéis y otros días al
revés. ¿Qué hacer después? Lo que queráis. Un dibujo, contárselo a alguien o
algún día simplemente pensar en ello. Me gustaría que algún día decidierais
contármelo o mandarme el dibujo para eso tenéis el correo electrónico o mí
teléfono.
También voy a mandar una manualidad, esa no va a ser diaria,
porque el día solo tiene 24 horas. Y por último os mandaré unas fichas cada día
de un aspecto a trabajar. Y podéis hacer las que os apetezca.
Se que este trabajo se suma a lo que ya os mandan vuestros
tutores por lo que no os agobies, es un trabajo de apoyo, es un trabajo para
que penséis y para que ocupéis momentos en los que no sabemos que hacer, para que ocupemos estos momentos tan complicados, tan difíciles y tan singulares. Esperando que todo vaya bien, un
saludo y un abrazo de los de antes.
TAREA DÍA 14 DE ABRIL
La primera adivinanza va a ser de las fáciles, para empezar
con buen pie:
Esto
era un gallo que puso un huevo en los Picos de
Europa.
A donde fue, ¿al norte o
al sur?
También os voy a proponer una sopa de letras. Espero que
la solucionéis rápidamente.
Los cuentos cortos
que vamos a empezar a leer o escuchar son los “Cuentos por teléfono” de Gianni
Rodari. Hoy empezamos con la introducción.
Érase una vez...
... el señor Bianchi, de Varese. Su profesión de viajante de comercio le obligaba a viajar durante seis días a la semana, recorriendo toda Italia, al Este, al Oeste, al Sur, al Norte y al centro, vendiendo productos medicinales. El sábado regresaba a su casa y el lunes por la mañana volvía a partir. pero antes de marcharse, su hija le recordaba:
- Ya sabes papá: un cuento cada noche.
Porque aquella niña no podía dormirse sin que le contaran un cuento, y su mamá le había explicado ya todos los que se sabía, incluso tres veces. Y así cada noche estuviera donde estuviese, el señor Bianchi telefoneaba a Varese a las nueve en punto y le contaba un cuento a su hija. Este libro es, pues, precisamente el de los cuentos del señor Bianchi. Veréis que todos son un poquito cortos: claro, el señor Bianchi tenía que pagar las conferencias de su bolsillo y por eso no podía hacer llamadas muy largas. Solo alguna vez, cuando había realizado un buen negocio, se permitía unos minutos de más. Me han dicho que cuando el señor Bianchi telefoneaba a Varese, las señoras de la telefónica suspendían todas las llamadas para escuchar sus cuentos. ¡Claro! Algunos son tan bonitos...
Mañana empezaremos con el primero. Por ahora podéis investigar donde esta Varese, o que es eso de las " señoritas de la telefónica"
Por último, hoy vamos a trabajar la comprensión lectora, por
lo tanto os adjunto unas fichas de comprensión lectora de Orientación Andujar. Empezamos por comprensión de frases y terminamos por comprensión de textos. Un saludo, un abrazo y
un beso muy, muy fuerte.
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